domingo, 14 de febrero de 2010

En busca de mi identidad religiosa


Como he comentado, mi identidad religiosa sigue un tanto, o bien, un todo indefinida. En las últimas semanas he investigado acerca de los diferentes criterios y creencias de las diferentes tendencias religiosas. Me he dado cuenta que existen muchas creencias de varias religiones que me agradan, sin embargo, no todo de ellas.
Me molesta ver como el gran poder que la gran mayoría de las religiones tiene sobre la gente se basa en el miedo. Mientras más castigador sea su Dios mejor siguen el patrón de conducta preestablecido. Yo entiendo que muchas veces puede ser más motivador respetar las reglas cuando de lo contrario se te impondrá un castigo eterno, pero ¿será realmente necesario amenazar con ello? ¿No podremos como humanos simplemente aprender a respetar al prójimo y lo ajeno? Yo creo que sí, es sólo que necesitamos de un cambio de cultura.
Es curioso cómo, cuando se hizo ver al Dios del catolicismo como un ser misericordioso y tolerante, mucha gente dejó de respetarse y le fue más sencillo faltar a las reglas y mandamientos. Y es por ello que desde mi punto de vista, debemos comprender que no debe de haber algún castigo más allá que el de nuestra propia conciencia reprimiendo nuestra mala actitud y falta de respeto al prójimo y a nosotros mismos.
Hasta ahora, las tendencias que más me han llamado la atención son la del New Age y la del Ateísmo ya que estas han sido las únicas que han tratado de integrar a la sociedad y no de segregarla y separarla con todos sus paradigmas y clasicismos.
Y para bien, seguiré intentando descubrir mi identidad religiosa y descartar todas aquellas ideas y conceptos que no me ayuden a convertirme en la persona que quiero ser. Y me complace hacerlo porque independientemente del resultado de ello, sabré que estoy buscando una razón y un porqué y no sólo me estaré conformando con la religión que me impusieron mis padres y seguiré sus mandamientos y creeré sus creencias porque es lo más sencillo, porque es más difícil buscar un nuevo sentido que seguir actuando por tradición.